Epson ha reducido los SKU de sus modelos TM-m30III y ha dotado de mayores poderes a cada dispositivo.

A veces, sencillamente, menos es más: esto también es aplicable a la TM-m30III de Epson. En lugar de toda una serie de modelos, ahora nos encontramos con dos modelos, tremendamente atractivos, de esta impresora de recibos para puntos de venta móviles. Ambos presentan un diseño moderno y bien definido, así como una superficie dotada de un tratamiento especial que mitiga el crecimiento bacteriano. Esto es una gran ventaja, especialmente en puntos de venta del comercio minorista y la restauración, donde las impresoras entran en contacto con distintas personas, por ejemplo, cuando los clientes toman su recibo por sí mismos.

Dos se convierten en uno

Contrariamente a su predecesora (la TM-m30II), la TM-m30III solo se encuentra disponible en dos variantes de este modelo: como modelo estándar y como modelo con Wi-Fi/Bluetooth, ambos con opción de carcasa en blanco o negro. No obstante, si alguien piensa que la nueva TM-m30III ofrece menos funciones, se equivoca. El modelo estándar de la TM-m30III presenta muchas de las funciones e interfaces que sus clientes ya valoraban en los modelos anteriores; y, además, ¡el modelo con Wi-Fi / Bluetooth ofrece conectividad móvil mejorada!

Lo mismo, pero aún diferentes

Lo que la TM-m30III tiene en común con su predecesora es su compacto y elegante diseño. Aun así, Epson ha logrado darle una estética aún más definida, moderna y angular. Una de sus nuevas prestaciones es la interfaz USB-C PD, que ejerce simultáneamente la función de fuente de alimentación directa y de conexión rápida con tabletas y que permite la transferencia de datos. SE pueden conectar periféricos de caja registradora, como escáneres, teclados y básculas, directamente a través de USB-A. También es compatible con los sistemas operativos Android y Windows, además de iOS. Adicionalmente, se ha mejorado la detección de próximo fin de papel y, ahora, también funciona en orientación horizontal y vertical. Los sensores reconocen cuando el papel se está agotando e informan al usuario con antelación para evitar tiempos de inactividad innecesarios. Y, con la función de «descurvado», sus clientes crearán recibos singularmente planos a máxima velocidad de impresión.